jueves, 5 de febrero de 2015
AQUEL ITUZAINGO DE LA PUNTA DEL ESTE
En el principio no fue el toplees, ni el surf, ni los festivales, ni los grandes hoteles.
Era solo la Punta del Este del Puerto de Maldonado, donde despertaba un pueblito llamado Ituzaingó.
Empezó por un saladero que fundaron los hermanos Lafone y años más tarde, en el 1860, un faro comenzó a brillar.
Hoy se convirtió en carta de turismo uruguayo, a nivel mundial.
La naturaleza concibió tres islas en el límite entre el Río de la Plata y el Océano Atlántico, una de ellas se unió al continente, se convirtió en península y se llamó Punta del Este del Puerto de Maldonado, las otras dos, quedaron rodeadas de océano.
Sus primeros pobladores fueron aborígenes bravos, después desfilaron por la zona diversos grupos, en algunos casos verdaderas rondas de guapos, buscando enriquecerse o colonizar.
Por eso dicen que la verdadera historia de este lugar, está enterrada tanto en el océano, como en los jardines y arenales.
Un día llegó José Garibaldi, hombre de más de un mundo y también Charles Darwin, atraído por los secretos de estas tierras.
Y alrededor del año 1811, vino Francisco Aguilar otro de los personajes que estará siempre presente en la historia de P. del E, Agilitó el transporte, pescó ballenas, exportó cueros e importó camellos a este lado del mundo, para acarrear arenas, arar y civilizar.
Desde 1829 el pueblo se llamó Ituzaingò hasta que en 1907, una ley declaró como P. del E., el conjunto de casas de la zona.
A esta altura de la historia, un par de ingleses radicados en el Uruguay, los hermanos Lafone, se convirtieron en dueños del paraíso, compraron P. del E., la Isla Gorriti y la explotación lobera.
Años más tarde, cuando el estado recuperó la zona, empezaron a afincarse las primeras familias.
El primer hotelero fue Pedro Risso y cuentan que en esos tiempos, revólver hacía las veces de campanilla, porque los huéspedes, de Don Pedro desde sus casillas playeras, llamaban al mozo a balazo limpio.
Otro y faltan muchos, hicieron muchas otras cosas, como Don Antonio Mrak, que fundó una escuela, un correo, un telégrafo.
Henry Burnet plantó pinos y sus proyectos interesaron a Antonio Lussich, que creó uno de los parques más hermosos del mundo.
óLos hermanos Caballo con sus exportaciones, la aparición del ferrocarril y la construcción de caminos y carreteras, la venta de los primeros solares, la Iglesia, operaron importantes transformaciones en la zona.
Con su perfil de gran ciudad, su bahía llena de velas, sus jardines, sus casonas, todo en constante crecimiento, Punta del Este, se convirtió en nuestro principal destino turístico, a nivel internacional.
A LA HORA SEÑALADA
A pesar de que el reloj ha recorrido un largo camino, no ha podido superar la maquina más perfecta que existe: el cuerpo del hombre.
Los seres humanos siempre preocupados por medirlo por medio del sol, el fuego la arena, el agua, todo mientras el tiempo pasa.
Antiguamente parecía “inmóvil”, porque no se sabía como medirlo, fue entonces por necesidad y través de la observación de los fenómenos físicos, que el ser humano descubrió la posibilidad de crear instrumentos para medir ese tiempo, aparentemente “inmóvil”.
Una sumaria estaca clavada en el suelo, les permitió descubrir que la sombra variaba con la posición del sol,la estaca no tardó en convertirse en reloj de sol, primera forma de medir el ritmo del día y de la noche.
A partir de allí, diferentes mecanismos basados en el fuego, la cera, el aceite, o las clepsidras de agua, permitieron al hombre contabilizar diferentes lapsos de tiempo, como minutos, horas, días o años, del día o de la noche.
Pero pasó bastante tiempo hasta que, los elementos basados en la mecánica comenzaran su reinado.
Los primeros pasos los dio el italiano Pacífico en el siglo VIII, quien construyó un reloj accionado por contrapesas, que recibió de regalo el Rey Pepino el Breve.
Hacia el año 1300 estos mecanismos eran habituales en los relojes de iglesias europeas, torres y campanarios, como el de la Catedral de Salsbury, que aún funciona.
Y en Francia el Rey Carlos V, encargó un reloj mecánico al alemán Henry de Vick, de lectura rápida y sencilla, para colocar en la torre de su palacio
Y como los deseos de los soberanos son órdenes, allí estuvo el reloj inventado por Henry de Vick.
Pero la Ley del Péndulo enunciada por Galileo Galilei alrededor del año 1660, permitió a Cristian Huygens armar el primer reloj a péndulo, aplicado sobre un reloj de pared, que media horas y minutos con exactitud.
Ya no hubo más posibilidades de inmovilizarse en materia de tiempo y de mediciones, el reloj máquina implacable, se había echado a andar.
A pesar del avance tecnológico quedaban algunos problemas por resolver, como el desgaste de las piezas y la consiguiente inexactitud en la medición del tiempo.
En el año 1704 un relojero Nicolás Faccio, utilizó rubíes y zafiros como pivotes, piedras que por su dureza, redujeron los inconvenientes que producía la frotación del mecanismo de los relojes y así llegaron a la exactitud que buscaban y comenzó su difusión.
Como en materia de tiempo no hay posibilidades de detenerse, un inglés Robert Hooke siguió experimentando y descubrió el sistema de cuerda, lo que permitió la creación de los relojes portátiles, los que se llevaban en el bolsillo.
Eran aquellos de numerosas tapas de oro, en general marca Longines, que los señores extraían del bolsillo inferior del chaleco, con bastante parsimonia y algo de petulancia y así comprobaban con orgullo que era “la hora señalada”.
Cuentan los suizos, que fue una institutriz que se cansó de chocar con el reloj que llevaba colgado del cuello cuando se inclinaba en la cuna del bebe, que un día se lo ató en la muñeca, así nació el reloj de pulsera.
Después Hans Wilsdorf, prócer casi contemporáneo en lo que a relojes se refiere, sustituyó la cuerda por la energía que produce el movimiento del brazo, así creó el rotor.
También inventó las cajas herméticas capaces de sobrevivir a la inmersión y además desarrolló una forma efectiva de proteger los relojes, contra los golpes.
Pero no se conformó con eso, este genio de la relojería creó en el año 1945, el primer reloj pulsera con calendario.
Desde ese momento, se pudo llevar en la muñeca, una información que antes estaba reservada a complicados aparatos de astronomía.
Puede haber relojes de sol, de arena electrónicos, eléctrico, de cuarzo, cronómetros o mecánicos, a pila, inclusive atómicos.
La variedad de tipos y calidades de relojes es enorme, pero hay algo que les es común, todos ellos necesitan de una fuente y un control de energía.
Y finalmente podemos medirlo, derrocharlo, perderlo, conservarlo, matarlo, desearlo, podemos hasta hacer tiempo, todo menos mantenerlo inmovilizado. Contribuyo con este informe el Periodista Jaime Clara
martes, 3 de febrero de 2015
LA CORBATA Y SU HISTORIA
Corbata, inestimable herencia Croata
Esos escasos centímetros de tela que constituyen una corbata, pueden ser reveladores de la personalidad de un hombre.
Aunque aparentemente inofensiva, es un símbolo que ordena a los hombres y alguna vez también, a las mujeres.
Nació en el siglo XVII, con la llegada a Francia de los mercenarios croatas, que se colocaban en su cuello un pedazo de tela blanca llamada “kravatska”, que anudada como una flor, la dejaban caer sobre el cuello.
Los franceses la adoptaron de inmediato, la difundieron por el mundo y pese a su brevedad, se convirtió en símbolo político, que diferenciaba los partidos según su color, así como también el contexto social y económico.
Ha sido observada por algunos grandes como Honorato de Balzac, que decía: “el espíritu de un hombre se adivina por su forma de llevar el bastón o de anudarse la corbata, que además es la única prenda que abriga la individualidad.”
Otros, menos famosos que don Honorato, también han opinado, no solo sobre la corbata, sino sobre su ubicación en la anatomía masculina.
Según Elena Guinea famosa comentarista de modas, la ubicación de la corbata no es casual ni fortuita y agrega:” basta un ligero vistazo a ese trecho que une la cabeza con el pecho, para juzgar a un hombre.”
Esta ubicación singularizante es el lugar elegido también para otros fines: en el cuello se cumplen algunos castigos, como la guillotina y el ahorcamiento.
Cuando decimos que alguien es “cogutudo”, ubicamos en ese mismo espacio, el orgullo y la altivez.
¿En qué otro lugar del cuerpo, podrían ubicar su encanto las esfinges?
Finalmente nadie puede negar que el cuello, donde se consuma el abrazo, es el soporte imprescindible entre el cuerpo y la cabeza, de cualquier mortal.
Ahí se ubicó la primer corbata que se usó en el mundo, más tarde desapareció, pero para reaparecer triunfante, en la corte de Borgoña.
Y la corte de Versailles no solo la adoptó, sino que inventó un cargo para quien se ocupara de ella, el “cravatier”: el encargado de dar los toques geniales al lazo con nudo.
Tanto empeño se puso en sus pliegues, que se llegó a sospechar que constituían un buen escondite de mensajes, convirtiendo a la inofensiva corbata, en culpable de espionaje.
Tan culpable, que su fin llegó cuando en la revolución Francesa, se guillotinaron cuellos, pelucas empolvadas, caras con lunares, privilegios y linajes.
En ese mismo ruedo cayó la corbata, considerada símbolo de poder y la vida debió continuar, a “cuello descubierto” .
Pero ese ostracismo no fue prolongado, porque los mismos caudillos que la habían condenado, se empeñaron en proteger sus propios cuellos y así, Dantón y Robespierre respaldaron su nueva aparición.
En el año 1830 los colegios de deportes ingleses le dieron gran auge y el duque de Windsor, le dio al nudo, la forma que todos conocemos.
“Un buen nudo es como un buen paso” opinaba Oscar Wilde,
Finalmente, en la rutinaria tarea de vestirse todos los días, la corbata es el momento en que un hombre se detiene y se observa en el espejo.
E indudablemente ha acompañado al hombre en el acontecer humano, no siempre mansamente, a veces atenazando, o acalorando, pero siempre conteniendo un mensaje revelador de la identidad de su portador.
Según María Antonieta Doubourg profesora de Idioma Español y amiga inolvidable, el nudo torcido significa infidelidad. Por eso los hombres se esmeran en tener siempre el nudo derecho y pegado a la camisa.
YEMANYA DIOSA DE LAS AGUAS
Cada 2 de febrero, los devotos de Yemanja se acercan a las costas del río de la Plata para rendirle homenaje a la Diosa Del Mar.
Ella domina todas las aguas desde su monumento ubicado sobre la rambla a la calle Jackson, desde donde con actitud amplia y generosa, mira serena hacia el río ancho como mar.
La escoltan varias palmeras y un ombú, otro soberano pero de nuestros campos, la rodea una reja protectora, esta en lo alto de un pedestal apoyado sobre el suelo cubierto de piedras redondeadas venidas del fondo del mar, donde las ofrendas se adelantan.
En el pilar que la sostiene, poesías de Jorge Amado, Enrique Molina, Alma Vasconcellos alaban a la mujer madre de dioses.
Es una gran señora, símbolo de la maternidad y de fecundidad, su pelo es largo y al viento, tiene los brazos abiertos en señal de bienvenida, en la mano derecha empuña dos hipocampos, símbolos del amor eterno.
La envuelve un ropaje sostenido por un pecho ampuloso, tiene una pierna adelantada en actitud de caminante, una estrella en la frente y por detrás una gran ostra, que aluden a la energía y la vida por el agua.
El responsable de este monumento realizado en bronce es el escultor: U.U. Habegger, fue inaugurado en 1994 e ideado y patrocinado, por la asociación ATEEUMD, Asociación Templo Evangélico Espiritista Umbandista•” Menino Deus”
Su culto es de origen afro americano umbandista, es hija de Olokum, según su historiador Pierre Verger “se instalo en el atardecer de la tierra” se caso varias veces y fue madre de una inmensa prole de dioses.
Es sin duda el orixa femenino mas conocido en Brasil y Uruguay y de los rituales de febrero, participan tantas personas que no todas tienen que ver con el candomble.
La procesión de fieles y curiosos se inicia en las canteras del Parque Rodo, y acompañada de velas, tambores, bailes y cantos, se acercan al monumento que la representa.
Llevan flores blancas y celestes, joyas, espejos y otros accesorios femeninos,
así como alimentos, dulces, merengues y bebidas en homenaje a la mujer que promete a sus seguidores, proteger la familia, el hogar y conceder trabajo y salud. Que así sea!
Ayer 2 de febrero de 2015, se repitió exitosamente la ceremonia, aun para los que nos es extraña, es digna de respeto y admiración.
EL HELADO SU HISTORIA
El origen de los helados es muy antiguo, cuentan que los romanos inventaron el sorbete cuando mezclaban con nieve, frutas y miel.
Guardaban el hielo en profundos pozos y Nerón mandaba a sus esclavos a buscar trozos de nieve a las montañas para utilizarlo en la congelación de alimentos.
Con la misma convicción, los chinos afirman que ellos lo hicieron antes, lo cierto es que chinos, turcos, árabes, romanos y la corte de Alejandro Magno, todos ellos enterraban ánforas con frutas, miel y nieve para conservarlas y servirlas heladas.
Se atribuye a Marco Polo el haber divulgado en Italia recetas de la China, esto confirmaría la teoría de que el invento es chino, de Italia pasó a las cortes europeas y después a América.
La elaboración de los helados no era sencilla, había que disponer de nieve y de medios para conservar la temperatura, dificultades que limitaban el consumo, era un placer que podían disfrutar muy pocos, solo los reyes y los privilegiados.
La historia cuenta que un chef francés sirvió en la corte de Inglaterra crema helada con nieve como postre y le gusto tanto al rey, que le prohibió al cocinero tanto divulgar la receta, como servirlo en cualquier ocasión.
Pero la receta se divulgo a pesar de la prohibición del rey y en Francia le agregaron a la preparación, huevos y leche.
Después un italiano llamado Procopio inventó una maquina que mezclaba todo y se obtenía una crema parecida a los helados de hoy.
En el siglo XVIII los helados se hicieron muy populares, llegaron a EEUU, allí Nancy Jonson inventó una maquina heladora automática y después Jacob Fussel en 1851 fundo la primera fabrica, así llegaron a la industrialización.
Después Fahrenheit y otros sabios, contribuyeron con sus descubrimientos, a la producción de hielo y de helados.
Para los que les gustan muchísimo, hay un helado muy especial en Manhattan, se llama “Opulencia Dorada”, lo cubre una hoja comestible de oro de 23 kilates, todo por la módica cifra de mil dólares. Rico, no?
lunes, 2 de febrero de 2015
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CINCO FRASES VALIOSAS
Esta espia los invita a comenzar la semana con mentalidad de innovación. Estas son 5 frases sobre el tema.
“La mejor manera de empezar algo es dejar de hablar de ello y empezar a hacerlo”. (Walt Disney)
“
La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando”. (Pablo Picasso)
“Si piensas que eres demasiado pequeño como para hacer una diferencia, es que no has dormido nunca con un mosquito en la habitación”. (Proverbio Africano)
“Un hombre con una idea es un loco hasta que triunfa”. (Mark Twain)
“¿Te dijeron que tenés un trabajo? ¡Pues te mintieron! Tenés dos: el que tenés que hacer y uno más importante: la transformación de ese trabajo” (del libro No + Pálidas)
Cuatro Actitudes Para el Éxito
VIDA DE LAS AGUILAS
Entre las aves, el águila es la que vive más tiempo, cerca de 70 años.
Pero para alcanzar esta edad, ella debe tomar una difícil decisión; nacer de nuevo.
A los 40 años sus uñas se encogen y se ablandan, dificultándole agarrar las presas de las cuales se alimenta. El pico alargado y puntiagudo, se encorva.
Las alas envejecidas y pesadas, se le doblan sobre el pecho, impidiéndole emprender vuelos ágiles y veloces.
Le quedan al águila dos alternativas: morir o pasar por una dura prueba a lo largo de 150 días. Esta prueba consiste en volar a la cumbre de una montaña y buscar abrigo en un nicho cavado en la peña.
Allí golpea el pico viejo contra la peña hasta quebrarlo. Y espera hasta que le crezca el nuevo y pueda con el arrancarse las uñas.
Cuando despuntan las uñas nuevas, el águila extirpa las plumas viejas y después de cinco meses, las nuevas plumas arranca. a volar de nuevo, decidida a vivir otros 30 años.
A lo largo de la existencia, la posibilidad de sobrevivir depende muchas veces de imitar el ejemplo del águila.
El que se entrega, abatido, al peso del sufrimiento y de las dificultades, tiende a abreviar sus días.
Sitio Diseñado Por RedComser Team 2000 * www.redcomser.com
Entre las aves, el águila es la que vive más tiempo, cerca de 70 años.
Pero para alcanzar esta edad, ella debe tomar una difícil decisión; nacer de nuevo.
A los 40 años sus uñas se encogen y se ablandan, dificultándole agarrar las presas de las cuales se alimenta. El pico alargado y puntiagudo, se encorva.
Las alas envejecidas y pesadas, se le doblan sobre el pecho, impidiéndole emprender vuelos ágiles y veloces.
Le quedan al águila dos alternativas: morir o pasar por una dura prueba a lo largo de 150 días. Esta prueba consiste en volar a la cumbre de una montaña y buscar abrigo en un nicho cavado en la peña.
Allí golpea el pico viejo contra la peña hasta quebrarlo. Y espera hasta que le crezca el nuevo y pueda con el arrancarse las uñas.
Cuando despuntan las uñas nuevas, el águila extirpa las plumas viejas y después de cinco meses, las nuevas plumas arranca. a volar de nuevo, decidida a vivir otros 30 años.
A lo largo de la existencia, la posibilidad de sobrevivir depende muchas veces de imitar el ejemplo del águila.
El que se entrega, abatido, al peso del sufrimiento y de las dificultades, tiende a abreviar sus días.
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domingo, 1 de febrero de 2015
MUERTE AL PIOJO
Historia reciente
A las 17 y 15 de un día de semana, un ómnibus 405 venia de Peñarol con destino al Parque Rodó.
En un par de asientos enfrentados, rodeados de gente, viajaban una maestra de una escuela cercana de contexto crítico y un hombre con precaria apariencia juvenil, en evidente situación de calle.
Vestía un pantalón deportivo de color indefinido, un buzo de algodón entre blanco y verde y completaba el conjunto un abrigo en cuya historia, algo se perpetuaba del pelo de los camellos.
Tenia un par de ojos negros brillantes y extraviados, la cara muy sucia, las uñas muy negras y llevaba una lata en una mano, en la otra un encendedor y una botella de medio litro de agua, que empinaba a cada momento.
Momentos después de tomar asiento, guardó la latita en un bolsillo del saco y colocó cuidadosamente la botella entre los pies.
Acto seguido comenzó a estrujarse el cuero cabelludo con ambas manos, intentando penetrar en alguna fila de su pelo solidificado y al grito de “no sale”!!! “no sale”!!!! ejecutaba casi a ciegas, entre uña y uña, saltarinos especimenes que lo anidaban. Después de cada ejecución, revisaba su ropa con esmero, comprobando que ningún ejemplar había logrado sobrevivir y al grito de “no sale, “no sale” !!! comenzaba de nuevo la operativa: dar muerte a otro piojo.
Historia reciente
A las 17 y 15 de un día de semana, un ómnibus 405 venia de Peñarol con destino al Parque Rodó.
En un par de asientos enfrentados, rodeados de gente, viajaban una maestra de una escuela cercana de contexto crítico y un hombre con precaria apariencia juvenil, en evidente situación de calle.
Vestía un pantalón deportivo de color indefinido, un buzo de algodón entre blanco y verde y completaba el conjunto un abrigo en cuya historia, algo se perpetuaba del pelo de los camellos.
Tenia un par de ojos negros brillantes y extraviados, la cara muy sucia, las uñas muy negras y llevaba una lata en una mano, en la otra un encendedor y una botella de medio litro de agua, que empinaba a cada momento.
Momentos después de tomar asiento, guardó la latita en un bolsillo del saco y colocó cuidadosamente la botella entre los pies.
Acto seguido comenzó a estrujarse el cuero cabelludo con ambas manos, intentando penetrar en alguna fila de su pelo solidificado y al grito de “no sale”!!! “no sale”!!!! ejecutaba casi a ciegas, entre uña y uña, saltarinos especimenes que lo anidaban. Después de cada ejecución, revisaba su ropa con esmero, comprobando que ningún ejemplar había logrado sobrevivir y al grito de “no sale, “no sale” !!! comenzaba de nuevo la operativa: dar muerte a otro piojo.
ACORAZADO ALEMÁN "ADMIRAL GRAF SPEE"
En el verano de 1939 comenzaron a soplar vientos de guerra en Europa, el 3 de Septiembre Inglaterra declaró la guerra a Alemania que dominada por el régimen nazi, había invadido Polonia.
Y un acorazado alemán llamado Admiral Graff Spee se dirigía en misión secreta, protegido por las brumas, a la costa del Atlántico Sur capitaneado por el marino alemán: Langsdorff.
La misión secreta consistía en destruir el comercio marítimo británico, hundiendo todos los barcos de esa bandera pero con una condición: debía evitar entrar en combate con naves de guerra iguales o superiores en armas.
Los tripulantes eran mil doscientos cincuenta y cinco cuando comenzaron sus ejercicios de combate.
Los radares del acorazado detectaron naves británicas en las cercanías, ese fue el principio de una cacería en la que el Graff Spee persigue y al mismo tiempo es buscado por naves inglesas.
Los alemanes lograron destruir nueve naves británicas en medio del Atlántico, mientras también consiguieron escapar de la persecución británica durante ciento veinte días.
El capitán del Graff Spee, Langsdorff era un hombre respetuoso de las Convenciones Internacionales sobre la guerra en el océano, un verdadero Caballero del Mar, respetó siempre la vida de los tripulantes británicos, primero los recogía en el Graff Spee y después abría fuego a las naves.
Mientras en tierra, Alemania seguía invadiendo todos los países que podía.
A esa altura de los hechos después de tres meses de combate, el Graff Spee necesitaba volver a su puerto madre para ser reparado, pero recibió la orden de navegar hacia el Río de la Plata, para interceptar la salida de Montevideo de cuatro naves británicas.
Y el 13 de diciembre de madrugada se encontraron, con rumbos contrarios tres de los cuatro cruceros ingleses, el Exeter, el Aquilles, el Ajax, y el Cumberland con el Graff Spee.
El combate con uno de ellos apenas duró una hora, el Éxeter abandonó la zona incendiado y arrojó al mar más de setenta muertos.
Pero el Graff Spee también tuvo treinta y seis heridos graves, por lo que el capitán Langsdorff decidió dejar los
muertos en un cementerio y los heridos en hospitales montevideanos.
En Montevideo, la presencia del Graff Spee produjo una gran conmoción, todo el mundo quería visitar el barco.
El 15 de diciembre, más de cuarenta mil uruguayos acompañaron los restos mortales de los jóvenes muertos a bordo hasta el cementerio Norte, donde todavía permanecen.
Y mientras los heridos eran atendidos, el capitán Langsdorff solicitaba tiempo al gobierno alemán para hacer las reparaciones en la nave que le permitiera volver a Alemania.
Pero como el gobierno alemán no le dio autorización, el capitán decidió sacar la tripulación y destruir el barco, para evitar que cayera en manos enemigas.
Mientras los marinos iban hacia la Argentina, una serie de explosiones conmocionaron a Montevideo, hasta que envuelto en llamas el acorazado Admiral Graff Spee, lentamente fue desapareciendo de las aguas en el puerto de Montevideo, en la Navidad del año 1939.
Y el Capitan Langsdorff cumplió con la tradición de los viejos marinos: ya que no había muerto a bordo, se suicidó envuelto en la bandera de su barco y dejó para sus superiores, una significativa frase:
“Para un capitán que tenga sentido del honor, su destino no puede ser diferente al de su nave.” Al Capitán del acorazado Admiral Graff Spee, hasta sus adversarios le rindieron homenaje.
En el verano de 1939 comenzaron a soplar vientos de guerra en Europa, el 3 de Septiembre Inglaterra declaró la guerra a Alemania que dominada por el régimen nazi, había invadido Polonia.
Y un acorazado alemán llamado Admiral Graff Spee se dirigía en misión secreta, protegido por las brumas, a la costa del Atlántico Sur capitaneado por el marino alemán: Langsdorff.
La misión secreta consistía en destruir el comercio marítimo británico, hundiendo todos los barcos de esa bandera pero con una condición: debía evitar entrar en combate con naves de guerra iguales o superiores en armas.
Los tripulantes eran mil doscientos cincuenta y cinco cuando comenzaron sus ejercicios de combate.
Los radares del acorazado detectaron naves británicas en las cercanías, ese fue el principio de una cacería en la que el Graff Spee persigue y al mismo tiempo es buscado por naves inglesas.
Los alemanes lograron destruir nueve naves británicas en medio del Atlántico, mientras también consiguieron escapar de la persecución británica durante ciento veinte días.
El capitán del Graff Spee, Langsdorff era un hombre respetuoso de las Convenciones Internacionales sobre la guerra en el océano, un verdadero Caballero del Mar, respetó siempre la vida de los tripulantes británicos, primero los recogía en el Graff Spee y después abría fuego a las naves.
Mientras en tierra, Alemania seguía invadiendo todos los países que podía.
A esa altura de los hechos después de tres meses de combate, el Graff Spee necesitaba volver a su puerto madre para ser reparado, pero recibió la orden de navegar hacia el Río de la Plata, para interceptar la salida de Montevideo de cuatro naves británicas.
Y el 13 de diciembre de madrugada se encontraron, con rumbos contrarios tres de los cuatro cruceros ingleses, el Exeter, el Aquilles, el Ajax, y el Cumberland con el Graff Spee.
El combate con uno de ellos apenas duró una hora, el Éxeter abandonó la zona incendiado y arrojó al mar más de setenta muertos.
Pero el Graff Spee también tuvo treinta y seis heridos graves, por lo que el capitán Langsdorff decidió dejar los
muertos en un cementerio y los heridos en hospitales montevideanos.
En Montevideo, la presencia del Graff Spee produjo una gran conmoción, todo el mundo quería visitar el barco.
El 15 de diciembre, más de cuarenta mil uruguayos acompañaron los restos mortales de los jóvenes muertos a bordo hasta el cementerio Norte, donde todavía permanecen.
Y mientras los heridos eran atendidos, el capitán Langsdorff solicitaba tiempo al gobierno alemán para hacer las reparaciones en la nave que le permitiera volver a Alemania.
Pero como el gobierno alemán no le dio autorización, el capitán decidió sacar la tripulación y destruir el barco, para evitar que cayera en manos enemigas.
Mientras los marinos iban hacia la Argentina, una serie de explosiones conmocionaron a Montevideo, hasta que envuelto en llamas el acorazado Admiral Graff Spee, lentamente fue desapareciendo de las aguas en el puerto de Montevideo, en la Navidad del año 1939.
Y el Capitan Langsdorff cumplió con la tradición de los viejos marinos: ya que no había muerto a bordo, se suicidó envuelto en la bandera de su barco y dejó para sus superiores, una significativa frase:
“Para un capitán que tenga sentido del honor, su destino no puede ser diferente al de su nave.” Al Capitán del acorazado Admiral Graff Spee, hasta sus adversarios le rindieron homenaje.
LA DESCUBRIÓ LA PORCELANA
LA PORCELANA y MARIA ANTONIETA DE FRANCIA
Como muchas otras creaciones del hombre, la porcelana ha sido siempre considerada un artículo refinado y lujoso, por la belleza de su decoración, su dureza, y maleabilidad, tanto que desde tiempos remotos ha estado presente en mesas de reyes y príncipes. Los chinos la inventaron dos siglos antes de la era cristiana, sus primeros ensayos vinieron de las minas de Kaoling, denominación que le dio nombre a la materia prima con la que se fabrica. Tal como la conocemos hoy alcanzó su máximo esplendor en el siglo XIII de nuestra era, durante la dinastía Sung.
Su nombre es sinónimo de “cau-co” una caparazón marina muy blanda, que en algunos lugares de Oriente se utilizó como moneda. Su fórmula fue un secreto muy bien guardado. En el Renacimiento, durante el mecenazgo de los Medicis, se intentó imitarla pero sólo se logró una pasta parecida pero blanda y a pesar de que en Inglaterra se obtuvo una buena calidad de este material, era sólo falsa porcelana.
Marco Polo, a su regreso de China, comentó la belleza de la cerámica que había visto allí y cómo extraían la “porcelana “del mar, pero desconocía su fórmula, pensó que tal vez esas piezas estaban producidas con la caparazón nacarada de un molusco. Durante varios siglos en Europa no lograban un producto comparable a la porcelana china, y fue recién en el siglo XVIII (alrededor del año 1709), que el alquimista alemán Fritz Boetticher encontró accidentalmente un yacimiento de caolín en las canteras de Sajonia y logró además una fórmula muy parecida a la china. La pasta la obtuvo después de una complicada elaboración con arcilla blanca, caolín, feldespato, cuarzo, pero el verdadero secreto no estaba ahí, también tenian que descubrir la cocción. Después de muchos ensayos, el alemán alquimista descubrió que debía someter la pasta a temperaturas inusuales, de 1,300 a 1.400 grados durante doce horas seguidas. Tan exitoso fue el experimento que Boettiche fundó una fábrica en Meissen, Alemania, una de las mas célebres de Europa y la rodeó del mas absoluto misterio, solo los empleados conocían la fórmula y el método de cocción.
También en Alemania, en la zona de Bavaria se produjo una porcelana de excelente calidad, en la que se combinaba el trabajo esmerado con la perfección de la materia prima que utilizaban. Hasta hoy y a pesar de la evolución de la técnica, es la calidad de los componentes fundamentales lo que determina la excelencia del producto. Francia entretanto, durante el reinado de Luis XIV en la ciudad de Sevres, también empezó a producir porcelana dura, mas tarde se descubrió un yacimiento de caolín en Limoges y así la elaboración cobró un impulso asombroso, cada vez mas palacios y grandes casas se ornamentaban con porcelanas europeas. Un último paso en la fabricación en pasta dura es la decoración, que se realiza por medio de un proceso de fileteado manual. Especialmente célebre es la de Sevres por el uso del azul turquesa y se debe al talento de quien fuera director artístico de la fábrica: Jean Claude Duplessis.
Cada una de las piezas salidas de Sevres ostenta la fecha de fabricación y de decoración, así como el nombre del artesano que la adornó. Era tan hermosa y querida que Maria Antonieta, durante la Revolución Francesa, fascinada con la belleza de de su juego de te de Sevres no lo pudo abandonar cuando intentó huir a Bélgica con su familia, el 20 de junio de 1792. Vestida como una mujer del pueblo, la denunció su necessaire de viaje de porcelana con sus iniciales, que finalmente la llevó al patíbulo.
Como muchas otras creaciones del hombre, la porcelana ha sido siempre considerada un artículo refinado y lujoso, por la belleza de su decoración, su dureza, y maleabilidad, tanto que desde tiempos remotos ha estado presente en mesas de reyes y príncipes. Los chinos la inventaron dos siglos antes de la era cristiana, sus primeros ensayos vinieron de las minas de Kaoling, denominación que le dio nombre a la materia prima con la que se fabrica. Tal como la conocemos hoy alcanzó su máximo esplendor en el siglo XIII de nuestra era, durante la dinastía Sung.
Su nombre es sinónimo de “cau-co” una caparazón marina muy blanda, que en algunos lugares de Oriente se utilizó como moneda. Su fórmula fue un secreto muy bien guardado. En el Renacimiento, durante el mecenazgo de los Medicis, se intentó imitarla pero sólo se logró una pasta parecida pero blanda y a pesar de que en Inglaterra se obtuvo una buena calidad de este material, era sólo falsa porcelana.
Marco Polo, a su regreso de China, comentó la belleza de la cerámica que había visto allí y cómo extraían la “porcelana “del mar, pero desconocía su fórmula, pensó que tal vez esas piezas estaban producidas con la caparazón nacarada de un molusco. Durante varios siglos en Europa no lograban un producto comparable a la porcelana china, y fue recién en el siglo XVIII (alrededor del año 1709), que el alquimista alemán Fritz Boetticher encontró accidentalmente un yacimiento de caolín en las canteras de Sajonia y logró además una fórmula muy parecida a la china. La pasta la obtuvo después de una complicada elaboración con arcilla blanca, caolín, feldespato, cuarzo, pero el verdadero secreto no estaba ahí, también tenian que descubrir la cocción. Después de muchos ensayos, el alemán alquimista descubrió que debía someter la pasta a temperaturas inusuales, de 1,300 a 1.400 grados durante doce horas seguidas. Tan exitoso fue el experimento que Boettiche fundó una fábrica en Meissen, Alemania, una de las mas célebres de Europa y la rodeó del mas absoluto misterio, solo los empleados conocían la fórmula y el método de cocción.
También en Alemania, en la zona de Bavaria se produjo una porcelana de excelente calidad, en la que se combinaba el trabajo esmerado con la perfección de la materia prima que utilizaban. Hasta hoy y a pesar de la evolución de la técnica, es la calidad de los componentes fundamentales lo que determina la excelencia del producto. Francia entretanto, durante el reinado de Luis XIV en la ciudad de Sevres, también empezó a producir porcelana dura, mas tarde se descubrió un yacimiento de caolín en Limoges y así la elaboración cobró un impulso asombroso, cada vez mas palacios y grandes casas se ornamentaban con porcelanas europeas. Un último paso en la fabricación en pasta dura es la decoración, que se realiza por medio de un proceso de fileteado manual. Especialmente célebre es la de Sevres por el uso del azul turquesa y se debe al talento de quien fuera director artístico de la fábrica: Jean Claude Duplessis.
Cada una de las piezas salidas de Sevres ostenta la fecha de fabricación y de decoración, así como el nombre del artesano que la adornó. Era tan hermosa y querida que Maria Antonieta, durante la Revolución Francesa, fascinada con la belleza de de su juego de te de Sevres no lo pudo abandonar cuando intentó huir a Bélgica con su familia, el 20 de junio de 1792. Vestida como una mujer del pueblo, la denunció su necessaire de viaje de porcelana con sus iniciales, que finalmente la llevó al patíbulo.
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